Son muchas las técnicas que utilizamos para controlar lo que comemos: desde contar las calorías, hasta dejar de comer ciertos grupos alimenticios que suelen engordar más.
La técnica que sigue este plato holandés es medir las proporciones. De esta manera, el ETE Plate está dividido en porciones, de acuerdo a la cantidad ideal de alimentos que debemos tomar de cada grupo alimenticio. Tiene una porción para hidratos de carbono, otra para vegetales y verduras, otro para carne o pescado y un espacio libre para mezclar.
Dicha división se basa en las porciones recomendadas en el sistema alimenticio holandés, que sigue el mismo que el de Estados Unidos. Y su eficacia se probó en Thin Bizzy, un proyecto que enseña a niños obesos y con déficit de atención hábitos de vida saludables.
El sistema también lo recomiendan ya varios dietistas holandeses para ayudar a sus pacientes y cualquier persona lo puede comprar por 24,50€.
Disponible en inglés y en holandés, tiene el aliciente de que son producidos por la asociación Drukkerij Mooi, donde trabajan personas con discapacidades físicas y mentales.
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